Principios de primavera, 22 grados, Córdoba y un torneíto de golf, la cosa pintaba bien, así que un grupito decidimos aceptar la invitación de los compis de la Asociación de Periodistas Deportivos de Córdoba, e irnos para allá a disfrutar unos días del tiempo, el turismo, la gastronomía y el golf. Un gustazo pasear por las calles del centro histórico después de visitar la Mezquita, el Alcázar de los Reyes Cristianos o el Cristo de los Faroles y entre paseo y paseo, cervecitas con los consiguientes aperitivos, para a la hora de comer disfrutar de un salmorejo cordobés y un espléndido rabo de toro. Y después del turismo llegó el viernes 31 de marzo, y el torneo de golf en el Real Club de Campo de Córdoba. Era la tercera edición del “Córdoba Golf Experience”, ya el año pasado nos habían invitado pero no pudimos ir pues coincidía con uno de los torneos de nuestro circuito, pero este año no coincidía, así que allí nos fuimos un aguerrido grupo en representación de la AEPJG, dispuestos a disfrutar, cosa que hicimos, y a tratar de dejar el pabellón lo más alto posible, y no se nos dio mal del todo. En segunda categoría nuestro compañero José Andrés García Viu, quedo en segundo lugar con unos más que decentes 34 puntos. Y además en ninguna de las categorías quedamos los últimos. Y más teniendo en cuenta la dificultad del campo, precioso, pero ¡muuuy difícil! Para que os hagáis una pequeña idea os diré que es como si La Herrería, estuviera enclavada en el campo de Las Matas pero con más árboles y unos hoyos más largo y más complicados. Una preciosidad de entorno en medio de Sierra Morena, con bosque por cualquier sitio que miraras y unas calles y unos greenes en perfecto estado. Y lo que tenían de bonitas las calles, lo tenían de difícil, muchas de ellas presentaban una salida ciega por la gran cantidad de vegetación que había que sobrevolar en la salida, las calles, al ser en plena sierra, con marcadas caídas de derecha a izquierda o viceversa y unos greenes amplios y rápidos. En resumen unas circunstancias que hacen que al campo le denominen “El infierno Califal”. A pesar de todo, y si el año que viene nos vuelven a invitar, que creo que sí, os recomiendo que no os lo perdáis. ¡Ah! Se me olvidaba y después del torneo un esplendido sorteo de regalos en el que todos nos llevamos premio y algunos, la mayoría, dos veces. No quiero finalizar sin volver a dar las gracias a los compañeros de Córdoba por la invitación y por el magnífico trabajo realizado en la organización del torneo, cuidando hasta el último detalle. ¡Muchas gracias! ¡¡¡Os lo perdisteis!!!
